¿Quién soy?

Lo que hace unos años suponía duras horas de camino para repartir el fruto de la molienda, hoy en día son apenas unos minutos en coche. Me encuentro a escasos 20 KM de Oviedo en el Valle del Trubia, hoy en día famoso por acoger una de los caminos más importantes de Asturias: la Senda del Oso. Lo que fue en su día una de las principales rutas ferroviarias, se ha convertido en un río de bicicletas y turistas, síntoma del drástico cambio de la sociedad y la economía.


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Prácticamente inactivo desde hace unos años, he conseguido sobrevivir gracias al cariño y afición de mi propietario que me ha mantenido en funcionamiento hasta hace unos años. Todo el valle se encontraba sembrado de molinos que eran el sustento de familias y familias de la zona, pero con el paso de los años han ido desapareciendo y ya son muy pocos los que se mantienen en pie. No lejos de mi se encuentran otros dos, también de la familia pero que hace años que se mantienen en silencia sin el roce de sus piedra al moler.


Moler esa es nuestra labor, principalmente maíz para alimentar el ganado o servir de principal ingrediente para la borroña, parte fundamental de la dieta asturiana de los pueblos de hace no muchas décadas. Ya hace muchos años que no muelo escanda, cereal de invierno similar al trigo utilizado en la fabricación del pan asturiano.

Otra muestra de mi importancia pasada es un molino que se encuentra a pocos pasos de mi. Integrado dentro de la vivienda junto a la cocina, su sonido melódico y en cierta medida hipnótico, adormecía como una nana a familias enteras que vivían sobre él.

"Mis parientes"

Dependiente de la localización y en especial de la que la Naturaleza pueda ofrecer, se pueden encontrar ingenios dedicados a la molienda de diversos tipos: de agua, de viento , de mareas que aprovechan la subida del mar o los llamados  de sangre, movidos por la fuerza de un animal, generalmente un burro o mula. Todos ellos comparten un fin común: moler un sólido, originalmente con fines alimenticos pero en algunos casos también industriales.

La riqueza hidrológica de Asturias ha querido que el agua sea el principal motor y en torno al que han nacido los molinos asturianos junto con parientes cercanos como el batán.

Mi funcionamiento

Pertenezco a los molinos de rueda horizontal, es decir, aquellos a los que el agua impulsa mediante una rueda paralela al curso del agua, llamada rodete. Cerca aprovechando directamente el caudal del río Trubia, se encuentra otro molino de rueda vertical, más raro por estos lares. En él, la rueda de mayor tamaño que la mía, se sitúa perpendicular al cauce río, requiriendo un mecanismo de poleas para transmitir el giro.


No soy complicado y me baso en un principio simple: convertir la energía potencial (altura) en energía cinética (velocidad) de rotación.


Antes de llegar al Cántábrico, las aguas que me alimentan procedentes de las montañas del Valle del Trubia son almacenados en una cuba o depósito. La salida de la cuba del agua a presión golpea el rodete transformando su fuerza bruta en un movimiento circular que es transmitido por un eje a la piedra de molienda o muela. No hace mucho tiempo las truchas se escondían recelosas junto al rodete pero la disminución del caudal han acabado con ellas.

El grano, cae con lentitud en el orificio central de la muela desde donde inicia su recorrido entre las piedras. Recorrido que poco a poco lo transformará en harina. Aún recuerdo el duro trabajo de picado de las piedras para recuperar su rugosidad limada por el duro roce. Con paciencia y experiencia, el molinero golpeaba el pico recuperando las muescas que rompan el grano hasta casi pulverizarlo.

Mis dueños

durante el estraperlo ... 

Nuestra influencia cultural

No sólo hemos sido un sustento como base para la alimentación del cuerpo sino también del espíritu a través de la Cultura. Qué sería del gran libro de la literatura española, El Quijote sin la escena del Hidalgo atacando los molinos. Con seguridad, si alguien nos preguntase por una escena de este libro, a gran parte la primera que se vendría a la cabeza sería ésta. Aún hoy en día, la escena de Don Quijote luchando su imaginario enemigo sería escena estrella en cualquier superproducción cinemetográfica de Hollywood. Afortunadamente, hoy en día aún podemos disfrutar de esos gigantes en Campo de Criptana.

Otro de los puntos donde se puede ver la importancia que hemos tenido a través de la historia es el Refranero. Éste ha encontrado un auténtico filón de oro en el molino como inspiración para sus sabios consejos:

Agua pasada no mueve molino

Comulgar con ruedas de Molino

aunque otros se inspiraban en la picaresca y (malas) leyendas que existían entorno a la profesión de molinero:

Maestro de molino, ladrón fino

Fuente: revista Folklore

También el cancionero español, se vio bien alimentado por aventuras y desventuras de mis dueños: los molineros y molineras.

Vairas de ellas se pueden encontrar en esta página.

Nuestro diccionario también es reflejo de nuestra incluencia, por ejemplo Maquila, témino hoy en día usado para procesos de subcontratación de servicios, tiene origen en la transacción en especie habitual en el pago por los servicios de molienda: 

Quien dijo maquilar, quiso decir robar.


Para acabar el más pícaro y curioso: el Moulin Rouge de París. Si bien, es una réplica y nunca cumplió funciones molineras, es posiblemente el molino que más caras felices ha visto pasar bajo sus puertas.

¿Quién te puede ayudar a conocernos?

Entre el caos de la web, son millones las referencias que aparecen en Google através de términos como molino, Moulin, water wind o Windmill. Intentaré resumir las que creo parecen conocerme mejor: